Confesiòn de un Encuentro
Estoy de pie,
Los faroles quemados
Han huido.
Las esquinas fracturadas,
Son redondas inmaculadas.
La demencia del sentir
Embriaga el éter.
Vuelo, volando.
Me tiré al vacío,
amistades estables
Observaban,
Más de un pánico
Con valor enarbolada
Sin bandera.
Estoy tablas
Con la vida,
Tablas entre telones
Con personas,
Un ángel cuidó de mí,
Más de uno lo sé,
Se formaban como entes,
La explicación es silencio,
Recibir el milagro.
Dormí en angustias,
En techos ajenos
aguas que no eran mi patria,
Sudores marchitaban mi lecho,
Llegan ellos,
¿De donde no lo sé?
Pero están.
Quizás en alguna tortilla
De maíz, frijoles con queso,
En un Atole de feria,
En mi plumilla al escribir
Lágrima Escarlata
En Guatemala,
En la Zona 9,
En la oscuridad entre cipreses,
Con frío,
y algo temeroso,
Estaba pisando fondo,
Lo sabía.
¿Recuerdas?
Si tu recuerdas, no tenia todas las respuestas,
No las tengo ahora tampoco.
Pero soy casi libre, achaques algunos,
Experiencias espectaculares.
Son algunas confesiones, después tanto camino recorrido,
De caer muchas veces, levantarme otras màs.
Ahora vivo en Panamá, no tengo intenciones de irme viajaré si, pero regresando a corto plazo.
Encontré un jardín llamado Rosas para las Anas.
Los faroles quemados
Han huido.
Las esquinas fracturadas,
Son redondas inmaculadas.
La demencia del sentir
Embriaga el éter.
Vuelo, volando.
Me tiré al vacío,
amistades estables
Observaban,
Más de un pánico
Con valor enarbolada
Sin bandera.
Estoy tablas
Con la vida,
Tablas entre telones
Con personas,
Un ángel cuidó de mí,
Más de uno lo sé,
Se formaban como entes,
La explicación es silencio,
Recibir el milagro.
Dormí en angustias,
En techos ajenos
aguas que no eran mi patria,
Sudores marchitaban mi lecho,
Llegan ellos,
¿De donde no lo sé?
Pero están.
Quizás en alguna tortilla
De maíz, frijoles con queso,
En un Atole de feria,
En mi plumilla al escribir
Lágrima Escarlata
En Guatemala,
En la Zona 9,
En la oscuridad entre cipreses,
Con frío,
y algo temeroso,
Estaba pisando fondo,
Lo sabía.
¿Recuerdas?
Si tu recuerdas, no tenia todas las respuestas,
No las tengo ahora tampoco.
Pero soy casi libre, achaques algunos,
Experiencias espectaculares.
Son algunas confesiones, después tanto camino recorrido,
De caer muchas veces, levantarme otras màs.
Ahora vivo en Panamá, no tengo intenciones de irme viajaré si, pero regresando a corto plazo.
Encontré un jardín llamado Rosas para las Anas.
entrada de Samuel Bassàn M. a las
21:27
1 comentarios:
Mi querido Samy, cumplí con lo prometido, entré y .... leyendo recordé los momentos de charla, las vistas de Panamá desde tu "atalaya", con tu perfil en primer plano, los cambios de luz en tus calles, los sonidos y las sensaciones, aquellas de haber estado antes ahí y conocer cada rincon del "santuario" del amigo, el caballito, los cuadros colgados en las paredes, el calor sofocante viendo las águilas, los buenos momentos vividos y el inmenso cariño y la ternura que nos profesamos.
Acertaste de pleno, los rugidos de la leona son de satisfaccion ante lo que leo ahora.
Los agujeros negros que conociamos han dado paso una lucha diaria por dejar atrás lastres y amarras y eso me hace feliz.
Feliz por el amigo, feliz pq sale todo lo que el puede dar... que es mucho... y feliz por ver plasmados tus sueños en letras.
Y..... como tu nos decias siempre en Panamá "Ud. necesita a alguien como yo en su vida".
Con todo el afecto de siempre
Sonia
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