lunes, 10 de diciembre de 2007

Asì

Pasó tormenta,
esquivaste pasión.
La calma que sientes
no es buena,
quedó arrastrándose
en piel.

Duermes a solas
pensando en la historia
de un amor,
tocada por aquel ciego
que se vuelve eterno
con el silencio de su acordeón.

Niegas todo,
aceptándolo todo.

Que controversia
cuando el sentimiento herido
sabe del bálsamo
que lo deja sentado
en una sala de espera
que no tiene consultorio,
porque la cura esta curada,
cuando el corazón a oscuras
busca los labios de la mujer
que amó.

Abro la ventana

mi vista se pierde.